La urgencia de la autoevaluación

Por Jorge Echazábal

Desde 1997, en reunión trienal del CEC en Costa Rica, se sembró la semilla de la necesidad de tener instrumentos de evaluación que nos permitan valorar los procesos que viven las instituciones educativas. En esa ocasión se acordó “pedir una evaluación anual al departamento de educación cristiana o junta administrativa de cada país” (refiérase a Plan Básico, Cap. 3, Sección B, 9.5 Evaluación periódica y Apéndice C 1 pág. 198). Con una visión que se anticipaba a procesos que hoy y cada día cobran mayor importancia, se pretendía tener información sobre aspectos que nos llevaran a reflexionar acerca del impacto del Instituto Bíblico en relación con su misión. Sigue leyendo